Eso si la buena suerte llegó junto con mi mamá.. quien vino a acompañarnos y ayudarnos en todo este proceso... (para que se rían, le tocó dormir en colchón inflable y saco de dormir, todo un acontecimiento para ella.. jaja)
Aunque estuvimos varios días en la casa ordenando y armando todo, hicimos también algunos paseos en las afueras de Bogotá: a Villa de Leiva, Zipaquirá y dentro de Bogotá le mostramos Usaquén, la Candelaria, la Calera, etc...
Fueron unos días increibles con ella, nos regaloneó mucho, paseamos y gozamos el poder estar nuevamente juntos después de tantos años... Mamá, mil gracias por toda la ayuda, la compañía y el tremendo apoyo que fuiste... la Amelia te va a echar mucho de menos y nosotros más aún... Aqui van varias fotos para que vean...